¿Cuándo un despido se puede considerar como improcedente?
Llegas a tu puesto de trabajo un lunes por la mañana y el jefe te cita a su despacho. Al entrar te comunica que debes abandonar la empresa sin justificar los motivos del despido. Esta situación cada vez se repite más en nuestro país, por lo que debes estar correctamente asesorado para afrontar este caso. Para ello te vendrá bien contar con el respaldo de abogados en Monzón.
Casos más comunes
El despido improcedente se produce cuando la compañía decide de manera unilateral rescindir la unión contractual que le une con el trabajador sin causa justificada. La empresa hará todo lo posible para demostrar que dicho cese ha sido motivado por causas objetivas y así disminuir la indemnización al empleado. La legislación contempla que habrá un despido improcedente cuando se den las siguientes circunstancias:
- No se respeta el procedimiento de despido incluido en los artículos 51 y 55 del Estatuto de los Trabajadores, que se basa en la entrega de la carta de despido en mano y por escrito al trabajador, con la fecha y causas que lo motivan.
- La compañía debe reunir las suficientes pruebas para demostrar que el empleado no ha cumplido con sus obligaciones.
- Motivos discriminatorios: Serán declarados como improcedentes los despidos que se realicen por razones de edad, sexo o raza, así como aquellos que vulneren derechos fundamentales o libertades públicas. Lo mismo ocurrirá cuando se traten de despidos por maternidad o por conciliación familiar.